Hay un producto en nuestra tienda que al principio lo compras porque es demasiado bonito para dejarlo escapar y después te acabas dando cuenta de que no puedes vivir sin él. Nuestros manteles individuales.
Originariamente fueron creados para proteger la mesa de golpes o manchas en esas comidas rápidas en las que no quieres vestir la mesa. Una solución fácil, práctica y sencilla ya que nuestros manteles pueden ser almacenados en cualquier cajón y se colocan en un segundo.
Además, eso de que sea antiadherentes por ambos lados hace que no se muevan ni se resbalen los artilugios que pongas encima. Y encima están disponibles en un montón de diseños demasiado bonitos por lo que también decorarán tu mesa.
¿Qué pasa con las cosas bonitas? Pues que quieres ponerlas en todos los sitios que sean posibles y así ha sido como hemos encontrado otros dos usos para nuestros manteles individuales que nos tienen in love.
Piensa en mesas estropeada y te vendrá a la cabeza una palabra: niños. Si además la unes con dibujos ya sabes que el desastre es inminente. Si quieres proteger esa mesa que tardaste un mes en elegir y evitar que acabe customizada por un rotu permanente (¿cómo acaban siempre esas cosas en manos de los más pequeños?), ponles a dibujar encima de un mantel individual.
Otro de los usos que más nos gusta y que además es terapéutico es colocarlo en el escritorio de trabajo. Te preguntarás por qué decimos que es terapéutico ¿no? Pues verás, quizás somos un poquito exagerados, pero es que no es lo mismo trabajar sobre una superficie sosa que sobre un estampado precioso que evita que arañes, manches o estropees la superficie de trabajo.
Bueno, vale. Quizás nos hemos pasado. Pero pruébalo. Elige aquí tu diseño favorito y verás como comienzas la jornada de otra manera
¿Se te ocurre otro uso para nuestro mantel? Cuéntanoslos todos. Recuerda que de vuestras ideas salió la colección para mascotas ¡Sois unos genios!