Desde pequeña he caminado por los acantilados de mi pueblo, parando a cada rato para recoger manzanilla de los muros medio derruidos, de entre la pizarra de las propias rocas, el olor es espectacular y el contraste con el mar agreste, no te deja indiferente.
Dentro de las tendencias de grandes elementos, Oriental collection utiliza las hojas sobre un rosa combinable con todos los otros productos de la colección, la gráfica en blanco hace de esta referencia, un producto idóneo para combinar y suavizar el ambiente de cada hogar. Por si solo es muy elegante y combinado con el resto de papeles, descarga y ofrece otra visión más contemporánea.
En casa de mi abuela había una habitación empapelada. En ella, el papel era amarillento, con flores, imagino que los años lo hicieron así, al mirar por la ventana veías las grandes hortensias que recubrían los muros del fondo de la finca. Esas dos imágenes son las que ahora veis convertidas en papel, la naturaleza y la nostalgia, juntas.
La vida en el Llagar es dura, se maya en otoño, pero no sirve cualquier día, tiene que ser menguante, porque es más propicio. Los agricultores van con sus sacos llenos de manzanas y ahí empieza la fiesta, esa que nos indica que el invierno anda rondando, que nos anuncia que el amagüestu está cerca.
A vueltas con un papel vintage, romántico pero sutil para una cocina, íbamos a empapelar toda la pared y también una zona de baldas, pero a él no le gustaban mucho las flores, no quería cansarse del color, así que rebajamos, y después volvimos a rebajar y al final salió. Justo lo que Sara y Sergio querían, nuestro primer papel de la colección, Monzon, por Monzoncillo, el apellido de mi clienta.