Además, es un reto apasionante porque esta habitación va a vivir miles de aventuras y su habitante crecerá tan rápido que necesita una habitación que se adapte a sus cambiantes necesidades ¡Menuda misión! Pero estamos seguros que con todo el amor que le vas a poner y los trucos que te vamos a comentar conseguirás una habitación preciosa.
Lo primero que debes tener en cuenta son las tonalidades del dormitorio. Olvídate del eterno debate entre rosa y azul. Ahora los cuartos infantiles se han modernizado y las barreras entre colores de niño y niña se han difuminado. Lo único que debes pensar a la hora de elegir colores es que los protagonistas se convertirán en el fondo sobre el que crear el resto de la habitación.
Colección de láminas Hello You
Alguno de los colores que más en tendencia están son los tonos tierra, el melocotón o puedes arriesgar por unos tonos más senior, como puedes ver en este post.
A la hora de elegir los muebles ¡recuerda que menos es más! No satures la estancia, el bebe crecerá y necesitará más cosas ¡pero en el futuro! Ahora céntrate en darle espacio libre para experimentar y jugar.
Otra de las reglas que debes priorizar es ¡cálido y mullido, por todas partes! Especialmente en el suelo. Puedes hacer uso de una alfombra vinílica que le proteja de las temperaturas del suelo y además es antibacteriana. También puede ser ideal crear un espacio con cojines, que cuando crezca se puede convertir en el lugar ideal para leer cuentos juntos.
Por último, no te olvides de los estímulos visuales. Un móvil en su cuna es un primer paso básico. Puede llevar también la diversión a las paredes con divertidos stickers o a lo grande con un mural.
¿Lista? ¡Empezamos con la aventura más salvaje de tu vida!
